El contexto externo condiciona a la economía que se viene. Sin embargo, desde el Gobierno nacional tratan de bajar el tono a los posibles efectos en la Argentina de una recesión global. Mientras en las Bolsas no saben qué hacer con tanta volatilidad, la política económica argentina necesita de ciertas correcciones para afrontar un 2012 que se presenta complicado. Los expertos consideran que es posible que la próxima gestión deba asumir ciertas reformas para que el país no abandone el terreno de la estabilidad. Entre ellas se mencionan la posibilidad de que el modelo sustentado por la presidenta Cristina Fernández sólo se someta a un pequeño retoque. Otros, en cambio, consideran que la futura administración debe propender a atacar los problemas de fondo, como el sinceramiento de la inflación.
¿Hacia dónde vamos?